Escribe: Mamela Fiallo.-

Hasta 6.000 niños al día podrían morir alrededor del mundo por causas prevenibles en los próximos seis meses, lo que suma a más de 1,2 millones en total. La causa: el impacto del cierre de la economía a propósito del coronavirus en los servicios de salud de rutina, advierte la ONU.
“Sin duda es la crisis global más grande y urgente que los niños han enfrentado desde la segunda guerra mundial”, dijo el Director ejecutivo de Unicef para el Reino Unido, Sacha Deshmukh.
El riesgo de que los niños mueran de malaria, neumonía o diarrea en los países en desarrollo está en espiral debido a la pandemia y “supera con creces cualquier amenaza presentada por el coronavirus”, advirtió Unicef, la agencia de la ONU para la Infancia, el 13 de mayo.
Las tasas de mortalidad infantil podrían aumentar hasta 45% debido a las interrupciones relacionadas con el coronavirus, mientras que las muertes maternas podrían aumentar en casi un 39%.
Dichas cifras están respaldadas por un análisis de la Escuela de Salud Pública Bloomberg de la Universidad Johns Hopkins, que se ha destacado por recopilar las cifras más precisas respecto al contagio del coronavirus. La investigación está disponible en la edición del diario de salud mundial The Lancet.
En entrevista con The Telegraph de Inglaterra, el jefe de salud de Unicef, Doctor Stefan Peterson, dijo que estas cifras eran en parte un reflejo de restricciones estrictas en casi todo el mundo que impide que las personas salgan de sus hogares sin documentación, lo que hace que no puedan acceder a servicios esenciales de atención médica.
Advirtió que los bloqueos generales impuestos sobre las personas con ingresos bajos y medios no son una forma efectiva de controlar la Covid-19 y podrían tener repercusiones mortales.
“Las medidas de bloqueo indiscriminado no tienen un efecto óptimo sobre el virus”, dijo a The Telegraph. “Si le está pidiendo a las familias que se queden en casa en una habitación en un barrio pobre, sin comida ni agua, eso no limitará la transmisión del virus”, dijo.
Agregó: “Me preocupa que las medidas de cierre se hayan copiado entre países por falta de saber qué hacer, rara vez con una contextualización de la situación local”.
Asegura que no se puede pretender imponer la misma norma para sociedades y realidades tan distintas. “El objetivo es frenar el virus, no bloquear a las personas”.
El hambre matará por día a más personas que el coronavirus en meses
Debido a las restricciones sobre la producción, importación y traslado de productos, sumado al desempleo masivo, la inminente “pandemia de hambre” traerá “la peor crisis humanitaria desde la Segunda Guerra Mundial”, advirtió el Director Ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos (PMA, WFP por sus siglas en inglés), David Beasley, al Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La cifra de muertos de hambre podría superar en velocidad a los fallecidos por coronavirus, 200.000 al día en un lapso de tres meses. “Debo advertirles que si no nos preparamos y actuamos ahora, para asegurar el acceso, evitar la escasez de fondos y las interrupciones en el comercio, podríamos enfrentar múltiples hambrunas de proporciones bíblicas en unos pocos meses”, dijo Beasley, quien recientemente se recuperó tras haberse contagiado del Covid-19.
América será el continente más golpeado por el desempleo
Mientras gran parte del mundo enfocó sus esfuerzos a aislar a la población para evitar el contagio masivo, la economía se detuvo y cerca de la mitad de la población activa mundial podría perder el empleo.
Según el último informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), 1,6 mil millones de personas perderán su sustento, a causa de la paralización económica que ha provocado la cuarentena de la Covid-19.
Solo en el primer mes de la crisis sanitaria, a nivel mundial se perdió el 60% de los ingresos de los trabajadores informales. América Latina y el Caribe sufrieron el golpe más fuerte, a la par de África, alrededor de 158 millones de personas trabajan en condiciones de informalidad, equivalente a 54% del empleo total, vieron reducidos hasta en 81% de sus ingresos.
Con una pérdida de horas de trabajo equivalente al 12,4% en el segundo trimestre, América será el continente más golpeado por el desempleo, frente al 11,8% en Europa y Asia Central. En el resto del mundo ronda el 9,5%.
Aunque hasta ahora los niños han sido los menos afectados por la letalidad de la Covid-19, el impacto sobre la economía y las restricciones de movilización los han vuelto particularmente vulnerables, más cuando sus padres no consiguen sustento. Por eso Unicef advierte que el impacto es no solo sobre el presente sino a nivel histórico. Pues implica un retroceso de décadas en función del avance que se ha logrado mundialmente en cuanto a la eliminación de las muertes infantiles prevenibles.
T. de PanAm Post