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La amenaza de la nueva peste

Escribe: Gustavo Álvarez Gardeazabal

Incendiar el país es la meta de los vándalos de la izquierda socialista/comunista.-

Cuando en la Edad Media se regaban las enfermedades terribles en los lomos de las ratas o en sus pulgas, las llamaban pestesporque iban tomándose de país en país, creciendo de acuerdo a donde fuesen los viajeros o llegaren los comerciantes con sus mercaderías.

Ahora en 2020 las pestes histriónicas que pretenden derrocar gobiernos o presidentes equivocados o sistemas económicos injustos se están regando por las redes.

No dejan los millones de muertos de las pestes sino estadosderrumbados.

Y como no necesitan vecindad para contagiarse sino capacidad de protesta y apasionamiento por destruir lo existente, cada vez se hace más fácilimitar en Chile lo que hacen en El Líbano o lo que hicieron los chalecos amarillos en Paris o los árabes en sus plazas cuando la primavera.

El deseo de cambio absoluto de las multitudes inconformes se compagina con la incapacidad mayúscula de quienes gobiernan para entender lo que requieren verdaderamente los estados. Y comoparece que nadie aprende en pellejo ajeno, la nueva peste se expande con facilidad y dureza.

Tal vez por ello, por lo que hemos estado presenciando estos días en Colombia temo, como muchos compatriotas, que elparo del 21 le quede grande a este gobierno y se le salga de las manos.

Y no es exageración, unsector político que perdió estruendosamente las elecciones el 27 de octubre y fue incapaz de asumir la derrota, no podrá entender jamás loque sus gobernados le quisieron decir. Ypeor aún, un gobernante que prefiere que le caigan baldados de desprestigio sosteniendo a un ministro como el de Defensa, que pudo haberlo cambiado como cualquierfusible quemado, es un gobierno que prefiere acercar el país al abismo y entregárselo a los capuchos antes que averiguar qué es lo que en todos los rincones de Colombia

están pidiendo a gritos. Nohay duda, nos va a llegar la peste.

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