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Los caprichos gay del “maligno”

Escribe. Luis Hernando Granada C.*

Como un vulgar culebrero de pueblo o encantador de serpientes, el “maligno” arrastra a Colombia hacia la hecatombe.

No ha transcurrido un mes desde que el “maligno” tomó “posesión” de un mandato alcanzado a base de triquiñuelas, engaños y trampas. Imagínense la escena, aunque muchos han visto a los encantadores de serpientes y culebreros de pueblo, que por lo general son timadores y manejan un bajo perfil. El susodicho personaje llega a una plaza pública, saca sus elementos, por lo general una serpiente, una caja de cartón, unas pomadas y otras chucherías. Hace su show, llegando incluso a dejarse morder por el ofidio para demostrar su “poder”. Y a través de ese falso “poder”, no faltará quien diga: “Qué man tan verraco”. Pero obviamente que en el caso del “maligno” muchos dirán: “Que man tan bellaco”.

Como lo decía, no lleva un mes supuestamente “gobernando” y todo lo que ha hecho es una farsa encadenada a una serie de palabras, amenazas y procedimientos que están llevando a Colombia a la destrucción o por qué no decirlo, a la hecatombe. 

Alguien dijo con mucha sabiduría: “Los que se niegan a gobernarse a sí mismos suelen estar empeñados en gobernar a los demás. Los que pueden gobernarse a sí mismos no suelen tener interés en gobernar a los demás”. Y la verdad está clara: El “maligno” no tiene  la capacidad de gobernarse así mismo. Empezó su carrera delictiva desde los 17 años y en hoja de vida –o indebida–, no se encuentra nada positivo. Ha delinquido, delinque y seguirá delinquiendo. Pero vamos al grano o a citar algunos de sus caprichitos gay:

La criminal Reforma Tributaria

La Reforma Tributaria no es otra cosa que el más criminal atropello al pueblo colombiano, porque aparte de que no es necesaria, hasta el aire que respiramos quedaría gravado así él y sus secuaces se empeñen en decir lo contrario. El ahorro, el consumo y la inversión tendrán que pasar a la historia o seguir albergada en la mente de los más optimistas.

¿Alguien me puede decir quién después de las marchas y paros que organizó el “maligno” para “joder” a Duque por la Reforma Tributaria ha podido ahorrar algo?… ¿Alguien ha podido consumir lo mismo de antes teniendo en cuenta que después de los paros y marchas del “maligno” los precios de los artículos de primera necesidad subieron escandalosamente?…. ¿Alguien ha podido invertir?… No; no sean injustos; no me vayan a decir que no porque los “podríticos” e incluso los vándalos del “maligno”  devengaron casi durante dos años de caos, entre $70.000 y $300.000 diarios. Ellos sí pudieron invertir y darse sus gustitos: comprar marihuana, bazuco, licor, etc.

Y lo que más duele es que me reitero en que la Reforma Tributaria no es necesaria. Si al “maligno” le interesara la tranquilidad del pueblo colombiano y si el “cambio” anunciado fuera positivo, ya habría empezado con el inventario de los bienes incautados a los narcoterroristas de las farc, el eln, las bacrím e incluso a los micro traficantes para ponerlos en venta, porque ahí lo que hay es dinero para recaudar.

Pero como la idea de los psicópatas comunistas/socialistas es sumir en la pobreza absoluta al pueblo, entonces resulta con la idea de montar dos ministerios más, inútiles, innecesarios y tan costosos como el Congreso de la República, la JEP y la entrega de tierras a la mafia y el sostenimiento de los parásitos del Estado.

Decrecer la economía y aumentar el auge de la delincuencia

El “perdón social” es otro atropello a la Democracia y al país en general; primero porque liberar a violadores, asesinos, narcoterroristas y “podríticos” corruptos, es, en primer lugar, violar la “Prostitución del 91” más de lo que sido violada porque recordemos que la Reforma del 91 la construyeron y reformaron ellos –los de la izquierda– con cualquier cantidad de prebendas. En segundo lugar, el “perdón social” tiene como objetivo principal, aumentar  sus adeptos los cuales se convierten en votos para la reelección del “maligno”.

Para colmo de males, el ministro de Justicia, Néstor Osuna, que parecía un hombre probo y competente, lanzó una improvisada propuesta de “justicia restaurativa”, ampliando el campo de acción de la delincuencia con impunidad incluida.

Lo grave es que estas improvisaciones, no solamente violan la “Prostitución del 91” sino que pone en evidencia la complicidad de la supuesta “autoridad competente” con el crimen organizado. Es similar esta equivocación a la suspensión de los bombardeos a los campos de producción cocalera y la fumigación de los cultivos ilícitos. Cifras más o cifras menos, al paso que va el “cambio” en este sentido, en un año tendremos entre 500 mil y un millón de hectáreas de coca cultivadas en las tierras que simuladamente están expropiando, y más de 2.000 toneladas de cocaína. Y para rematar esta parte, según el “maligno”, no habrá extradición de narcotraficantes, y lo más obvio, de acuerdo al plan siniestro, es que si los llegan a detener in fraganti, sean conducidos ante el bodrio anticonstitucional creado e impuesto por el camarada “Chucky Santos” conocido con el remoquete de la JEP, una “institución” donde solo condenan a los policías y militares pero no a los narcoterroristas o traficantes.

La persecución a la Iglesia y a las “iglesias”

Con la payasada que hizo el “maligno” en una iglesia católica –arrodillado y todo–, ratificamos que el “maligno” es más falso que una moneda de cuero, y ya sabíamos, que cuando llegara a ostentar el “poder”, iba a perseguir a las iglesias. Por eso ahora algunos curas, empezando por el cómplice más grande de la guerrilla, el sacerdote de la “Omisión” de la Verdad, se empeñan en hablar y hacerle promoción a la “paz total”. ¿Será que no saben o quieren hacerse los tontos ante la gran verdad que es solo una: Mientras exista narcotráfico jamás habrá paz en ningún país. 

La iea del “maligno” es gravar con más impuestos a la Iglesia Católica y hacerle una encerrona a las otras “iglesias o sectas”. Pero no sabemos cómo va a hacer para descubrir los verdaderos ingresos de las otras “iglesias” donde el dinero fluye a borbotones.

Lo cierto y lo que presentíamos –porque lo cité en mi libro “La gran farsa de la izquierda”, era que como ateo, al igual que en otros países donde la mafia transnacional comunista/socialista se ha impuesto, la persecución a las iglesias era un hecho.

Ya empezó; misteriosamente y de la noche a la mañana, el oratorio del aeropuerto El Dorado fue cerrado aduciendo que fue una decisión de OPAIN, para “ofrecer un mejor servicio” para los viajeros y la comunidad aeroportuaria.

Sí, cómo no; seguimos avanzando hacia el abismo. Muchos mamertos e igenuos se tragaron el cuento del “cambio”; lo que ni siquiera sospechaban era que ese tal “cambio” era para que ellos pudieran vivir sabroso, mientras el pueblo seguirá aguantando hambre y sometido a los peores vejámenes.

** Luis Hernando Granada C. Periodista, Publicista, Director de www.visiondeltolima.com . Autor de la Novela “El Imperio del terror” y el libro “La gran farsa de la izquierda” y Gestor Cultural del Tolima

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