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Tragedia sentimental de Shakira

Informa: Elena de Los Ríos.-

La historia de amor ha superado prácticamente de todo: una diferencia de edad de diez años, acusaciones de fraude a Hacienda, rumores de infidelidad y maniobras económicas polémicas.

Otro escándalo de comisiones tiene al mundo en vilo: la actividad económica de Gerard Piqué le ha llevado a los titulares de todo el mundo como sospechoso de corrupción, aunque él insiste (y parece que con razón) en que todo lo que ha cobrado es legal.

De nuevo estamos ante un caso en el que la legalidad no incluye la ética, como el que protagoniza Luis Medina, el hijo de Naty Abascal y el duque de Feria, pero aquí el futbolista del Barcelona tiene algo más que perder que el aristócrata. Este vive en un relativo anonimato desde hace algunos años, mientras que Piqué ha cultivado una imagen profesional de impecabilidad que puede resentirse con este escándalo. Es el primero que le salpica, aunque su compañera sentimental y madre de sus dos hijos, Shakira, también ha estado envuelta en maniobras económicas dudosas.

¿Cómo lo ha hecho esta pareja para superar todo este fango financiero? La historia de amor de Gerard Piqué y Shakira no ha sido un paseo triunfal, aunque todo empezó antes del famosos flechazo en el Mundial de Sudáfrica, para el que la cantante colombiana cantó el conocido himno Waka Waka. La cantante y el futbolista español se conocieron en Madrid, ciudad a la que ella viajó para cantar en el Rock in Rio de 2010. Shakira se encontraba en el mismo local donde también estaban Piqué y Fábregas, y allí se bebieron juntos unos mojitos e intercambiaron teléfonos.

Rápidamente volaron los mensajes y, para cuando volvieron a encontrarse en el rodaje del videoclip del himno futbolero, ya tenían cierta química. “Me acuerdo perfectamente que se acercó y me dijo: Voy a ganar este mundial porque quiero verte al final del torneo e invitarte a una cena romántica”. Y lo cumplió,contó la cantante colombiana durante una entrevista para E! Online.

¿Qué hizo Shakira en Colombia?

Comenzó ahí un romance que llevó a Shakira a dejar su relación de diez años con Antonio de la Rúa, el hijo del ex presidente argentino Fernando de la Rúa, y a mudarse de Colombia a Barcelona. Piqué recuerda aquel momento perfectamente: “Gané el título más grande que uno puede conseguir y conocí al amor de mi vida. Salí de Sudáfrica siendo una persona diferente y viví una experiencia inolvidable”, ha confesado el defensa del FC Barcelona en una entrevista en el diario L’Esportiu.

En la Ciudad Condal, Shakira y Piqué han construido una mansión blanca que es un fortín y han tenido dos hijos, Milán (9 años) y Shasha (7). Ambos han lidiado desde el más absoluto silencio con rumores sin confirmar sobre supuestas infidelidades de él, pero lo que más ha pesado en la relación ha sido la diferencia de edad: Shakira tiene 45 años y Piqué, 35. Puede que esta brecha sea la que explica la rarísima idea que la cantante colombiana tiene sobre el amor y que explica que, a pesar de ser doblemente padres, ella no haya querido casarse. Lo explicó en una entrevista en 60 Minutes, el mítico programa de televisión del canal estadounidense CBS: “El matrimonio me asusta. No quiero que me vea como su esposa, sino más bien como su novia. Es como esa fruta prohibida, prefiero mantenerle atento y que piense que todo es posible dependiendo de su comportamiento”. La verdad es que sorprende esta visión tan antigua de las relaciones, en las que la mujer tiene de alguna manera que retener al hombre para que no se confíe y sea infiel.

¿Cuánto ha ganado Shakira?

Lo cierto es que la relación de Shakira y Piqué ha demostrado su fortaleza a propósito de los escándalos económicos que no dejan de menoscabar la reputación de ambos. El jugador ha desvelado que ha sido ella la que le ha empujado a ampliar su actividad al mundo de los negocios, hasta convertirse en el empresario del negocio deportivo multimillonario que es hoy. Shakira es su modelo de gestión de su imperio, que incluye no solo su actividad musical y televisiva, sino sus incursiones en la cosmética, la moda o el mercado inmobiliario. Su oportunidad para monetizar es obsesiva, hasta el punto de convertirse casi en un deporte. Es lo que le ha sucedido a Piqué con su cuestionable venta de la Supercopa a un país tan problemático como Arabia Saudí, solo por el placer de realizar una operación, como él mismo ha confesado en Twitch.

El jugador ha defendido su comportamiento en base a su legalidad, de la misma manera que Shakira sostiene que no ha hecho nada ilegal, ante la acusación de la Hacienda española que afirma que ha defraudado 14,5 millones de euros. La cantante ha presentado un recurso, pero en breve sabremos si la Fiscalía decide pedir pena de cárcel para ella.

T. de Mujer Hoy

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